Te vi, me sorprendió en ese instante tu chispeante forma de ser, tu sonrisa, tu simpatía, toda esa buena onda que transmitís. Te conocí, hace tres años y tres meses aproximadamente. No tardamos mucho en ser una sola, en que llegues a ser mi brazo, mi pierna, mi vida, mi sostén indispensable siempre, en ser esa palabra de aliento que necesito, esa frase que me deja pensando, ese mensaje a la mañana que me saca una sonrisa. Nunca entendí exactamente como fue, como de un día para otro llegaste a ser mi mejor amiga. Lo único que hoy se es que te amo hermosa, que sos de esas personas que me hacen el día mas lindo, que conoces cada uno de mis rayes de memoria y que NUNCA me fallo.

Gracias por soportarme, que no es nada fácil. Por dejarme sin palabras con tus consejos. Gracias por confiar en mí. Por compartir tantos momentos, tantos torneos, tantos nervios, tantas tristezas y alegrías. Gracias por llenarme de felicidad con tu sonrisa cada día más linda. Gracias por siempre tenerme en cuenta. Gracias, GRACIAS, gracias por absolutamente todo lo que haces por mí.
Ahora sí, vamos para donde vinimos, a lo importante, a la razón de que este acá sentada escribiendo para que vos este 30 de septiembre pierdas un valioso segundo de tu día en leer esta entrada. Felices 15 años, que no son poca cosa. Feliz diaaaaa, porque lo vas a recordar toda tu vida. Me pone muy muy feliz feliz que hoy sea TU noche bebita. Que hoy vallas a ser la consentidita, la loquita de siempre pero vestida de princesa. Ojala que disfrutes como nunca, con todas las personas que te amamos y estamos ahí solo por vos.Te deseo lo mejor alfon, amiga, besta, alfi, pelotuda. Te amo muchísimo.
PD: ah, felices 15 jeje
{Tenes la receta justa para hacerme sonreir, todo el tiempo}
No hay comentarios:
Publicar un comentario