Y si hoy me puedo comparar cada pilar en mi vida diría que:
Mi familia es lo más parecido a un rompecabezas que puede existir, lo más imperfecto que conozco. La raíz de todos mis rayes. Cambiante, muy cambiante últimamente. Cada loco con su locura dicen y así se rige todo (solo que en este caso la locura es la misma, el miedo al cambio, la falta de costumbre)
Mis amigas, básicamente mi distracción hacia todo lo malo que pueda pasar. Son mi sonrisa, mis días y mis noches. Son cada buen momento que recuerdo, la opción para escapar de los problemas y buscar algunos otros. Son ese espejo de verdad, esa bolsa de virtudes y defectos bien mezclados.
Mis logros, nulos o lo suficientemente escasos para que mi auto exigencia los reconozca. Por ahí no era eso lo que debería hacer o a lo que debería poner como meta en cada día, cada practica. En cuarto lugar pero no menos importante, la única persona que logro “cambiar” toda mi histeria, borrar cualquier enojo con una sonrisa y mostrarme que no todo es lo que parece. El único te amo que nunca espere que pudiera decir o escuchar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario